Ganó a Flecha por 63 a 41A pesar de la fría noche invernal, la calidez del ambiente que imperaba en el equipo, hacía presagiar que esta vez Saetas A se cobraría la revancha de la reciente derrota con Flecha en la primera rueda. Llegaron todos a la hora convenida (menos uno) y eso permitió al DT, Héctor Hidalgo, tener la tranquilidad necesaria para orientar a su equipo y dar las instrucciones precisas sobre lo que cada jugador debía hacer en la cancha y como contrarrestar el poderío de Carrasco bajo la bomba. Al final de su charla, Héctor Hidalgo dijo algo que quedó rondando en la mente de los jugadores: "De qué nos sirve golear a los otros equipos y pasar los cien puntos, si no somos capaces de ganar este partido. Recuerden, éste es el partido que vale la pena ganar."
El primer quinteto en entrar al tablado fue: René Salas, Luis Salvadores, Claudio Valdivia, Nano Pooley y Ricardo Meyer. Si bien es cierto que en Flecha no entraron jugando Carrasco y Barra, parecía, a primera vista, que el DT no había jugado bien sus fichas. Pero, en la cancha se demostró que el DT tenía razón, porque desde que comenzó el partido se vio a un Saetas con una actitud agresiva y con ganas de liquidar pronto el pleito. Con una defensa de zona muy aplicada y cuidando el balón en ataque. Saetas comenzó ganando 13 a 0 y al terminar el primer cuarto Saetas ganaba por 17 a 3, una ventaja tranquilizadora que abrió el camino al triunfo.
Sin embargo, las cosas se empezaron a complicar con la entrada de Manuel Carrasco en Flecha. En Saetas entraron Juan Anjel, Mario Miranda y Jaime Santander y salieron René Salas, Claudio Valdivia y Ricardo Meyer. La defensa continuó aplicada con una muy buena marcación de Juan Anjel sobre Carrasco, mientras Nano se entretenía haciendo tapones a Zurita. Pero les costó soltarse en ataque, ya que se vio un equipo con poca movilidad que no aprovechó en forma óptima sus piezas, especialmente a Jaime Santander. Saetas perdió este cuarto por 15 a 13 y el resultado final del primer tiempo fue de 30 a 18.
Al comenzar el tercer cuarto entraron Adelmo y René por Nano y Luisin. La defensa siguió eficiente y Carrasco sólo convirtió puntos de tiro libre. En ataque se ganó un poco en velocidad y al terminar este cuarto ya se podía oler el triunfo porque la ventaja se amplió a 16 puntos.
En el último cuarto entró Nano por Mario y después volvió a entrar Mario por Juan Anjel. El equipo se vio muy bien en defensa y a ratos funcionó en ataque, pero fue suficiente para ganar por un holgado 63 a 41.
Tal vez porque el triunfo fue más fácil de lo esperado, los jugadores de Saetas celebraron el triunfo pasivamente, como si hubiera sido sólo un trámite. Pareciera que los trinufos se disfrutan más cuando son más apretados, pero hay que reconocer que gracias al Director Técnico y sus sabios consejos y a la aplicación de los jugadores, fue posible conseguir un triunfo sin sufrimiento.
Ahora a disfrutar del campeonato y a celebrar en forma este merecido título.
Los flamantes campeones observan el partido preliminar desde las graderías del Gimnasio Ribereño.
Antes de iniciar el partido, los rivales se saludan y se desean suerte. 
Nano y Adelmo. Una amistad más reciente, ligados por una pasión: el básquetbol.
